domingo, 6 de abril de 2014

Cómo hacer el … MASAJE PERINEAL



 El masaje regular dentro del perineo de la mujer (zona comprendida entre la vagina y el ano) en la parte final del embarazo, ayudaría a la madre a relajar tensión en su perineo durante el parto. El masaje perineal prenatal podría reducir la necesidad de una episiotomía (la incisión quirúrgica para alargar la vagina, hecha justo antes del nacimiento), permitiendo que los tejidos de la madre no se desgarren durante el alumbramiento. El masaje perineal prenatal también permite que la madre expectante experimente sensaciones similares a las que sentirá cuando el bebé emerja, y de esta manera puede practicar relajar su perineo como deberá hacer durante el trabajo parto.
Se recomienda hacer el masaje perineal de 4 a 5 veces por semana de 4 a 6 semanas antes de la fecha probable de parto. Muchas mujeres encuentran este masaje incómodo por lo cual deciden no hacerlo, mientras que otras lo encuentran placentero y hasta sexualmente estimulante, lo cual contribuye un plus. La mayoría de mujeres que lo hacen sienten menos inflamación en el perineo luego del parto.
Advertencia: Si la madre presenta inflamación, infección, herpes o dolor vaginal, el masaje perineal puede empeorar o contagiar la condición, con lo cual se recomienda no hacer hasta que el problema desaparezca.    
Instrucciones para el masaje perineal: Puede hacerlo ella misma con ayuda de un espejo, o bien pedirle a la pareja que lo haga. En muchos casos es la misma comadrona la que realiza este tipo de masaje a sus pacientes.
1.    Asegúrate que tus uñas estén cortas. Lava tus manos antes de comenzar.

2.    Busca una postura que te resulte cómoda antes de empezar, podría ser en una posición semi-sentada apoyada en cojines, las piernas flexionadas y relajadas, otras mujeres lo encuentran más cómodo de pie y luego de una ducha.

3.    Lubrica tu índice y pulgares con aceite de almendras dulces o aceite de sésamo. Es importante que utilices aceites vegetales comestibles. No uses aceite de bebé ni perfumados. Desde el Ayurveda se usa el Ghee (mantequilla clarificada).

4.    Introduce tu dedo suavemente de 2cm a 4 cm en tu vagina, hacia dentro y tira hacia fuera (en la misma dirección que tu bebé saldrá) hasta que sientas algo un pequeño tirón.

5.    Presiona suavemente pero con firmeza hacia afuera, como estirando y desliza el masaje hacia el perineo (zona comprendida entre tu vagina y tu ano). Al llegar al punto más bajo de tu vagina presiona hacia bajo suavemente hasta que notes una ligera sensación de hormigueo (esa sensación más intensa es la que sentirás cuando la cabeza de tu bebé esté a punto de nacer). Mientras sientes ese hormigueo aprende a relajarte aún más y concentrarte en la respiración.  

6.    Mantén  la misma presión y rota suavemente tu dedo formando una “U” en dirección hacia arriba por 3 minutos.


7.    Utiliza ambos dedos índices y cambia las direcciones siempre que quieras, de forma regular, hasta que completes los 5 minutos. Hidrata tus dedos todo lo que necesites pero ten mucho cuidado con la higiene para evitar infecciones.
8.    A medida que te sientas más cómoda con el masaje aumenta la presión para que el perineo comience a estirarse.
El masaje perineal estira los tejidos vaginales, los músculos alrededor de la vagina y la piel del perineo. Lo importante de este ejercicio es la regularidad de su práctica. Al principio notarás que los tejidos están muy tensos pero poco a poco, notarás que se van haciendo más flexibles y elásticos. Es muy importante la relajación, visualizar la apertura, imaginar a tu bebé naciendo y al parto mismo. La relajación de la mamá juega un papel fundamental durante el masaje perineal como lo hará más tarde durante el parto.

Independientemente de que aún no se hayan comprobado rotundamente la eficacia de este tipo de masaje y su beneficios a la hora de un parto sin episiotomía, habría que insistir que tampoco resulta contraindicado, salvo en casos especiales que cada futura mamá deberá comentarlo con su médico y comadrona. Quitando estos casos individuales, que ya hemos mencionado arriba, como ser: dolor, molestias, herpes y otras cuestiones asociadas, el masaje perineal, desde el punto de vista de la psicológico y sexológico favorecería a un mejor conocimiento de la propia anatomía femenina y facilitaría a un aprendizaje sobre las respuestas fisiológicas, una mayor conciencia del parto y nacimiento del futuro bebé y sentir de alguna manera que una contribuye con la naturaleza en este momento de la vida tan especial como el embarazo, parto y nacimiento.

Desde la educación sexual, el masaje perineal es un aporte y complemento del trabajo corporal recomendado, como el yoga y el trabajo con los distintos tipos de respiraciones.

Aliento a que las futuras mamás se den la oportunidad de explorar sus sensaciones, vivencias, el contacto con ellas mismas y con la vivencia única que toda esta etapa representa.
Namaste
Eliana D´Alessandro


Referencias

- Penny Simkin: “The Birth Partner. A complete guide to childbirth for dads, doulas and all other labor companions”. Third Edition. Ed. Harvad Common Press, 2008.
- Murkoff, Eisengerg y Hathaway: “Qué se puede esperar cuando se está esperando”. Tercera Impresión. Ed. Medici, 2005.